viernes, 25 de enero de 2013



INTALCEMENTI I.LAB/RICHARD MEIER & PARTNERS
Por: Constanza Cabezas


Richard Meier & Partners compartieron con nosotros su último proyecto completo: Italcementi i.lab en Bergamo, Italia. El edificio, un nuevo centro de investigación y desarrollo para Italcementi, uno de las cinco principales productores de cemento en el mundo, es una muestra de diseño sustentable, que ha obtenido uno de las primeras acreditaciones LEED Platinium en Italia
Según la firma, Italcementi i.lab refleja no sólo el compromiso de la compañía con la sustentabilidad sino “la posición de la compañía en cuanto a liderazgo, avances tecnológicos y compromiso con la investigación y la innovación en el uso del hormigón”
En el comunicado de prensa, Dukho Yeon, Diseñador-socio a cargo, describe el proyecto: “i.lab es el edificio más sustentable de nuestra firma hasta ahora, encarnando lo escultórico y lo dramático, pero con formas simples, mostrando las posibilidades del hormigón en perfecto balance con el propósito técnico del edificio”

La organización interior del área del laboratorio responde a los requerimientos altamente específicos del programa. Una simple grilla estructural y un corredor central de circulación permiten una disposición eficiente y flexible para varios sectores. El ala sur contiene una sala de conferencias, una sala multiuso de dos niveles y una sala de juntas con cielo iluminado que sobresale en voladizo sobre el segundo piso. Adicionalmente patios bajo nivel entregan aire fresco y luz natural al laboratorio del sótano y a los espacios de máquinas.

El techo de la estructura forma una quinta fachada virtual perforada con un sistema de lucarnas que llevan luz natural al interior de las oficinas, corredores de circulación, y espacios de laboratorio y revitalizan los interiores con la cambiante luz natural
La implementación de un innovador hormigón armado blanco de alta resistencia desarrollado por Italcementi específicamente para esta estructura, significará una reducción en la contaminación causada por la emisión de autos y actividades industriales. El hormigón TX Active® blanco reacciona con rayos ultravioletas descomponiendo los contaminantes dañinos.

En línea con los esfuerzos continuos de la firma en temas de conservación de energía y desempeño ambiental, el edificio usa fachadas personalizadas de alto rendimiento, vidrio claro aislado de baja emisividad, e incorpora sistemas de energía renovable solar y geotérmicos. Paneles foto-voltaicos, paneles solares y pozos geotérmicos proporcionan cerca del total de la energía auto-suficiente, cubriendo todos los requerimientos de calefacción y refrigeración del edificio.

Richard Meier comenta: “Primero comenzamos trabajando con Italcementi y con su Presidente, Mr. Carlo Pesenti,mientras diseñábamos la Iglesia del Jubileo en Roma. La Iglesia fue inicialmente diseñada con hormigón blanco vertido en obra, pero en conjunto con Italcementi concluimos que 12 toneladas de paneles de hormigón prefrabricados eran una mejor manera para ejecutar el diseño.

El hormigón blanco desarrollado por Italcementi y ahora usado en la construcción del edificio i.lab en Bergamo es de auto-limpieza, por lo tanto siempre será blanco.
Con Italcementi, hemos trabajado juntos para crear un nuevo edificio de oficinas e investigación para el siglo 21 – un hito que se basa y confirma la tradición arquitectónica del país. El Italcementi i.lab refuerzo el compromiso de nuestra firma para una arquitectura asequible, abierta y sustentable.

Arquitectos: Richard Meier & Partners
Ubicación: Bergamo Province of Bergamo, Italy
Diseñadores Principales: Richard Meier, Dukho Yeon
Arquitecto Proyecto: Vivian Lee, Simone Ferracina
Colaboradores: Roberto Mancinelli, Dongkyu Lee, Amalia Rusconi-Clerici, Robert Kim, Cedric M. Cornu, Wen-Yu Tu, Guillermo Murcia, Luca Aliverti, Tetsuhito Abe
Año: 2013
Fotografías: Scott Frances – OTTO

jueves, 24 de enero de 2013



CDS OFFICES/BAKOKO



Diseñar la oficina en Tokio de la multinacional especialista en reclutamiento CDS fue una oportunidad para renovar y maximizar el valor de sus actuales instalaciones de dos pisos. Después de evaluar una amplia gama de opciones de uso del espacio, BAKOKO transformó el segundo piso en un lugar de trabajo eficiente y moderno, con elegantes y atractivas instalaciones para las reuniones y entrevistas en el piso de abajo.

La diversa y global fuerza laboral de CDS nos retó a crear un espacio de trabajo más colaborativo que relacionara las culturas occidentales y japonesas de la oficina. Como es típico en Japón, el personal trabaja largas horas en sus escritorios, pero están muy comprometidos con sus equipos de especialidad. Desafiamos a nuestro cliente a liberarse de la antigua cultura de los cubículos mediante la creación de una gran transparencia. La nueva apertura fomenta la comunicación espontánea y crea un importante vínculo visual desde el escritorio hacia la vegetación del exterior.

Una diversidad de espacios de trabajo, reunión y descanso generan oportunidades de moverse e interactuar durante todo el día. El punto central de copiado/reunión fomenta las reuniones de pequeños grupos; la zona del gran ventanal con generosos sofás invita a reuniones más informales fuera del escritorio con el fin de no interrumpir a los compañeros de trabajo; una despensa y un atractivo salón desdibujan el límite entre los descansos y las reuniones productivas.

La sensación de apertura se logró mediante la eliminación del cielo acústico suspendido de azulejos. Los accesorios de iluminación hechos a pedido proyectan luz hacia arriba y hacia abajo, y a la vez reflejan una luz difusa hacia las losas de hormigón visto. Una sala de reunión redonda y central se compone de una elegante estructura de madera que soporta los muros de policarbonato entregando un lugar privado para reuniones internas más sensibles.

En la planta baja, un flujo constante de candidatos suelen llegar para entrevistas privadas hasta bien entrada la noche. Generar una buena impresión no sólo es importante para los candidatos. CDS también busca presentarse a través de un ambiente limpio, moderno, y elegante. Como hemos trabajado en estrecha colaboración con la alta dirección, la evaluación y la mediación de sus diversas necesidades y flujos a través del diseño se convirtió en un tema central.
 Trece salas de reuniones – algunas de las cuales pueden ser reconfiguradas en un centro de conferencias con 60 asientos – ofrecen una gran variedad de formatos y ambientes. El “núcleo” color plata está rodeado por una cinta negra en el piso: un loop que guía a los candidatos a lo largo del recorrido sin ningún tipo de callejones sin salida.
Arquitectos: BAKOKO
Ubicación: Tokio, Japón
Arquitecto A Cargo: Alastair Townsend, Kayoko Ohtsuki
Director De Proyecto: Cosmos More
Contratista: Wakoh
Cliente: CDS K.K. – Tokyo
Area: 810.0 m2
Año: 2012

miércoles, 23 de enero de 2013



PARADOR ARISTON/MARCELO BREUER



Ubicado en el barrio La Serena en Mar del Plata, Argentina, el conocido edificio del Restaurante Ariston hoy en el abandono y deterioro, fue diseñado por el arquitecto argentino, Marcelo Breuer (gran difusor del Movimiento Moderno) y construido el año 1948. Este proyecto originalmente destinado a contener reuniones sociales, baile y cócteles, se destaca por ser una planta elevada con una forma curva inspirada en la forma de trébol que permite el máximo de acristalamiento.

El Parador Ariston es uno de los íconos de la arquitectura moderna en Argentina, junto, entre otros, a la Casa de Puente, de Amancio Williams y a la Casa Curutchet de Le Corbusier.

Este restaurante con forma de trébol, que contó con la colaboración de los arquitectos Carlos Coire y Eduardo Catalano, se presenta como un volumen curvo definido por una generatriz que se desplaza apoyándose en dos planos paralelos al suelo, los cuales forman una cruz de vértices curvos. Esto permite emplazar libremente este objeto sobre la explanada donde se encuentra.

El volumen de hormigón armado se sustenta por cuatro pilares que expresan fielmente el ideal del modernismo, la forma sigue la función. Esta construcción fue terminada en sólo 60 días, y con una estructura con losas de doble armadura, y para aligerar cargas, se utilizaron losetas de lava volcánica, material poco conocido en la época y el lugar.

Gracias a su forma y grandes ventanas, se lograba desde su interior, un contacto visual integrado y permanente con el paisaje de alrededor, conocido por sus dunas y mar.

Marcelo Breuer, fue contratado por la Facultad de Arquitectura de la UBA, y fue contactado e interesado en realizar este proyecto, como una manera de prestigiar la zona sur de Mar del Plata. Este renombrado arquitecto húngaro, estudió en la Bauhaus de Weimar, dirigida por Walter Gropius, y posteriormente tuvo a su cargo la dirección del taller de muebles de la escuela, período en que diseño la silla Wassily, un emblema del mueble moderno. Abandono el taller en 1928 para dedicarse a la arquitectura, radicandose en Berlin y luego exiliado en Estados Unidos.

Actualmente estudiantes de arquitectura llevan adelante acciones en pos de la recuperación a través de la página de Facebook “Recuperemos el Ariston”.
Arquitectos: Marcelo Breuer
Ubicación: Mar del Plata, Buenos Aires Province, Argentina
Equipo: Carlos Coire y Eduardo Catalano
Referencias: Grupo Facebook Recuperemos El Ariston, TECCNE, SCA
Año Proyecto: 1948
Fotografías: Cortesía de Recuperemos el Ariston, Usuario de Flickr: ladyandrux, Usuario de Flickr: fabricio contreras ansbergs, Cortesía de TECCNE

martes, 22 de enero de 2013


BODEGA CAMPO VIEJO/IGNACIO QUEMADA ARQUITECTOS



La bodega Campo Viejo se sitúa en un altiplano sobre el valle del Ebro, La Rad de Santa Cruz, cubierto por 37 hectáreas de viñedo ondulado, con vistas panorámicas en todas las direcciones.  El programa se desdobla, de manera que la zona para recibir a las visitas se sitúa sobre el viñedo a modo de château mientras la bodega, cuyo tamaño, 45.000 m², hace impensable situarla sobre el cerro, se construye haciéndose parte de él, a la manera de una obra de land art, quedando oculta desde el viñedo.

La eficacia y racionalidad deseables en unas instalaciones modernas no son incompatibles con el uso ancestral de enterrar las bodegas sino que, al contrario, enterrar supone conseguir de manera natural las condiciones idóneas para la elaboración y crianza del vino: entrada uva por gravedad, serenidad, oscuridad, estabilidad de temperatura y humedad, ventilación pausada y natural. Enterrar el edificio supone también mayor facilidad para acercarse, con maneras actuales, a la experiencia arquitectónica de las bodegas tradicionales: espacios oscuros, serenos, muy marcados por la forma y textura de las paredes y por las escasas entradas de luz exterior.  Es la cueva, la luz natural que se cuela por una grieta, la luz artificial indirecta y tenue, el gran vacío después de un paso estrecho, una vista sobre el paisaje al final del túnel, esas sensaciones espaciales que todos tenemos en la memoria.

Al situarse en el borde del altiplano, la construcción enterrada se asoma para tomar aire y luz,  configurando el perfil del cerro, pasando a formar, tímidamente, parte del paisaje.  Las fachadas de hormigón terroso, rojizo como uno de los estratos que aparecieron al excavar, se construyen por apilado de estratos horizontales, de escala exagerada y tectónicamente intensos, que dan al conjunto aspecto de formar parte del terreno, de haber estado siempre allí dentro, y de que la misma erosión que ha hecho aparecer la roca rojiza en el frente hacia el río del vecino Monte Cantabria, lo ha dejado a la vista.  Las fachadas terrosas continúan hacia el interior de la bodega, dando forma primero al patio de entrada, que centraliza al modo tradicional todos los accesos a la bodega, y después a la galería, la cueva, que articula el edificio y que da paso a través de sus oquedades a los distintos espacios.

La bodega enterrada se organiza en dos volúmenes de dos plantas, la nave de depósitos de Elaboración y Almacenamiento de 15.000 m², de 12 a 16 m de altura, y un segundo volumen rectangular de 12.000 m² que alberga la nave de Crianza en Barricas en el piso inferior, de 7 m de altura, y los espacios de Crianza en Botella, Envasado y Almacén en la superior, de 6,5 m.  Estos  espacios comparten cualidades: estructura ordenada y modulada para su mayor aprovechamiento y versatilidad, ventilación  cruzada natural y control de constantes. El color gris humo de paredes y techos y la luz indirecta  que matiza la estructura, proporcionan el ambiente sereno y reposado adecuado para el vino.

Con acceso independiente por un camino rural que atraviesa el viñedo, los edificios Social y de Oficinas, que suman 1.000 m², se sitúan, dialogando entre si, en el extremo noreste del cerro, su punto más alto, con vistas privilegiadas.  Los dos  volúmenes nítidos de piedra y madera, con pocos pero intencionados  huecos encuadrando el paisaje, tienen  a la vez el carácter protector de un guardaviñas y el aspecto lúdico de una casa de campo. Protegen sus espacios interiores en los días duros, a la vez que se prolongan hacia el viñedo en terrazas cubiertas por marquesinas, para disfrutar de los días placenteros
Desde el edificio social se inicia el recorrido de visita a la bodega, sinuoso, que tiene su punto culminante en la visita a la nave de Crianza en Barrica, un vacío de grandes dimensiones, flanqueado por la sala de Crianza en Botella, que se recorre a través de una pasarela que desciende hasta las barricas y vuelve a subir hacia una terraza sobre el paisaje.


Arquitectos: Ignacio Quemada Arquitectos
Ubicación: Logroño, La Rioja, España
Colaboradores: Javier Montoya, Imanol Iturria, Leticia Uribe, Maitane Urdangarín
Estructura: Javier Valle
Instalaciones: Técnicas Agroindustriales
Área: 45,529 m2
Año Proyecto: 2003
Fotografías: Duccio Malagamba

lunes, 21 de enero de 2013


NEO BANKSIDE/ROGER STIRKHARBOUR



NEO Bankside comprende 217 unidades residenciales en cuatro pabellones hexagonales de entre 12 y 24 pisos y un bloque de oficinas de seis plantas, situado junto a la Tate Modern, uno de los museos más visitados del mundo.
Todos los edificios del régimen siguen el ejemplo del contexto inmediato y la calidad de todo el conjunto – en lugar de las piezas individuales – que crean drama. Los consejos generales de diseño en el antiguo patrimonio industrial de la zona durante los siglos 19 y 20, son en respuesta a un lenguaje contemporáneo que reinterpreta la coloración de los materiales y el carácter arquitectónico local. Los pabellones de acero y vidrio se integran perfectamente en el paisaje de Bankside. Los pabellones con su sistema han eliminado la necesidad de muros estructurales internos y crean espacios muy flexibles en el interior de los apartamentos. El arriostramiento está situado fuera del plano de revestimiento que le permite ser expresado como un sistema distinto y legible que da el esquema de gran parte de su lenguaje carismático. Torres elevadoras acristaladas proporcionan a todos los ocupantes excelentes vistas de Londres y el río, y una expresión dinámica de la circulación vertical en el lado oriental de cada edificio.

Un espacio público generoso, también se crea a nivel del suelo con un paisaje que define dos vías públicas claras a través del sitio conectando los jardines junto al río fuera de la Tate Modern hasta Southwark Street. La permeabilidad a través del sitio fue un factor clave para el diseño y la disposición imaginativa de los pabellones proporciona a los residentes con alojamiento generoso y luz máxima.

Paisajistas Gillespies ha creado una serie de espacios ajardinados ricamente detallados alrededor de la huella de los pabellones de los departamentos. El paisaje final incluye la siembra suave inspirado en los bosques nativos, equilibrando perfectamente con las líneas contemporáneas de los edificios. Excepcionalmente, en el corazón de una ciudad, los espacios al aire libre ofrecen oportunidades a los residentes de relacionarse con la naturaleza, y crear un nuevo micro-entorno ecológico establecido en este entorno urbano.

El diseño del paisaje fue desarrollado para proporcionar óptimos jardines privados, mientras que los separa claramente de las vías públicas. Una estrategia innovadora de paisaje se introdujo desde el principio para definir el umbral entre el espacio privado y de acceso público. Esta definición se ha logrado mediante el uso de bermas ricamente plantadas, fosos revestidos de piedra, estacas forradas de piedra y senderos estrechos que se combinan para crear un fuerte sentido de la identidad del sitio.

Arquitectos: Rogers Stirk Harbour + Partners
Ubicación: Tate Modern, Bankside, London Borough of Southwark, Londres SE1, Reino Unido
Arquitectos Del Paisaje: Gillespies
Año Proyecto: 2012
Fotografías: Edmund Sumner, Rogers Stirk Harbour + Partners, Gillespies